Los sistemas de riego de alta potencia alimentados a través de la red eléctrica o de generadores diésel están dando paso a sistemas fotovoltaicos (FV) de alta potencia que reducen el coste de la energía hasta en un 80%. Se trata de una nueva tecnología que resuelve los problemas derivados de la variabilidad de la potencia fotovoltaica provocada por el paso de las nubes, pero de la que se desconocen los datos de rendimiento previstos. Sin embargo, la adecuación del rendimiento de estos sistemas a las expectativas establecidas en la fase de diseño de los proyectos es fundamental para mantener la confianza de las comunidades de regantes y de los asesores técnicos de las entidades financieras.
En estos sistemas existen diferentes factores externos a la calidad del sistema fotovoltaico que influyen en los índices de rendimiento y que están relacionados con las características del sistema de riego fotovoltaico, intrínsecas a su diseño, con el periodo de riego en el que se activa el sistema y con otras circunstancias como el comportamiento del regante o las diferentes precipitaciones a lo largo del tiempo. Tenerlas en cuenta permite clasificar las pérdidas de PR en diferentes índices: PRPV, URIP, URPVIS y UREF.
QPV y el Instituto de Energía Solar de la Universidad Politécnica de Madrid han realizado un estudio y obtenido los valores experimentales de estos índices a lo largo de dos años de funcionamiento de un sistema de riego fotovoltaico de 360 kWp, aislado de la red y sin baterías, así como los valores del índice de resistencia al paso de nubes. Los resultados fueron presentados en el congreso CIES 2020 y publicados en sus actas.